La IA generativa ha llegado al sector financiero, y lo hará para quedarse
En la era digital actual, la Inteligencia Artificial ha demostrado ser una fuerza transformadora en diversas industrias. En el mundo financiero, donde la eficiencia y la precisión son fundamentales, las empresas están buscando formas innovadoras de mejorar sus operaciones y maximizar su rendimiento. La IA generativa llega como herramienta para mejorar los departamentos de contabilidad y finanzas. Estamos presenciando el posicionamiento de la IA como motor de cambio en el sector financiero, aportando eficiencias y nuevas oportunidades de crecimiento.
Los directores financieros (CFOs) siempre han sido cautelosos con el riesgo, especialmente en un área tan sensible como las finanzas. Sin embargo, están intrigados por las eficiencias que la IA generativa podría proporcionar, en un momento en que la reducción de costes se ha convertido en una prioridad para muchas empresas. Además, la creciente escasez de contadores es una preocupación, y la implementación de tecnologías generativas podría abordar este desafío de manera efectiva.
Las empresas han comenzado a experimentar y considerar el uso de la IA generativa en finanzas. En la actualidad, esta tecnología se está aplicando para predecir preguntas planteadas por analistas en llamadas de ganancias, investigar las llamadas de ganancias de competidores y responder consultas internas sobre políticas contables. Estos son solo los primeros pasos, ya que se espera que la IA generativa se convierta en una herramienta esencial para pronosticar rendimientos, agilizar el cierre de libros y reforzar las decisiones de inversión.
De la Automatización a la Innovación
En los últimos años, las empresas han adoptado la automatización de procesos robóticos para optimizar sus operaciones financieras. Esto ha sido especialmente útil en el procesamiento de datos de nómina, informes de gastos y revisión de documentos legales. El aprendizaje automático también ha sido ampliamente utilizado para predecir escenarios financieros y pronosticar flujos de efectivo. Sin embargo, la IA generativa lleva esta eficiencia al siguiente nivel, abriendo nuevas posibilidades para la toma de decisiones estratégicas.
Los expertos predicen que la adopción de la IA generativa transformará el conjunto de habilidades de los profesionales de finanzas y contabilidad en la próxima década. En lugar de realizar tareas repetitivas, los contadores podrán asumir roles más estratégicos, parecidos a científicos de datos e ingenieros de sistemas. Esta transición hacia funciones más significativas no solo aumentará la eficiencia, sino que también atraerá a recién graduados hacia el sector financiero.
El Camino hacia la Adopción Total
Aunque muchas empresas ya están utilizando tecnología de IA emergente en sus departamentos financieros, la adopción total de la IA generativa llevará tiempo. Se espera que las compañías incorporen gradualmente estas capacidades en sus sistemas de planificación de recursos empresariales existentes. A pesar de que algunos CFOs ya tienen planes futuros para implementar la IA generativa, se estima que la tecnología alcanzará su máximo potencial en un plazo de cinco a diez años, a medida que evoluciona y se adapta a las necesidades cambiantes de la industria.
Una encuesta de KPMG revela que el 59% de los ejecutivos están utilizando tecnología de IA emergente en sus departamentos financieros o fiscales, mientras que el 29% planea hacerlo en los próximos 12 meses y el 12% está interesado pero aún no tiene planes definidos.
La IA generativa se perfila como un catalizador para la transformación del sector financiero. Su capacidad para optimizar tareas rutinarias, mejorar la precisión de pronósticos y permitir a los profesionales de finanzas desempeñar roles estratégicos es una perspectiva emocionante. Aunque el proceso de adopción llevará tiempo, las empresas que abrazan esta tecnología estarán mejor posicionadas para prosperar en un entorno financiero competitivo. La IA generativa es una poderosa aliada para impulsar la eficiencia y la innovación en el futuro del sector financiero.