Ahorrar Costes IT con Experiencia Digital:

Rol del Cloud

En el actual panorama económico, las empresas se enfrentan al desafío de maximizar la eficiencia mientras lidian con la inflación en aumento y los crecientes gastos en tecnología de la información (IT). Según un informe de Gartner de 2022, los costes de los dispositivos han aumentado en un 20% desde principios de 2021, y se proyecta un crecimiento del 20.7% en el gasto de los usuarios finales en servicios en la nube para 2023.

Maximizar Eficiencia con Actualizaciones de Hardware

Para ahorrar costes IT, es crucial optimizar el rendimiento de los dispositivos. En lugar de depender de intervalos de tiempo fijos para actualizar hardware, la medición en tiempo real del rendimiento y la experiencia del usuario a través de herramientas automatizadas permiten una planificación precisa. Este enfoque basado en datos ha demostrado reducir los costes de reemplazo de dispositivos en un promedio del 15-20%.

Minimizar Gastos en Software No Utilizado

Gartner reportó que el 30% de las licencias de software como servicio (SaaS) quedaron sin usar el año pasado, lo que equivale a millones de euros desperdiciados mensualmente. Las soluciones centralizadas de gestión ayudan a descubrir y medir el alcance del uso de aplicaciones en una organización, identificando licencias no utilizadas o subutilizadas y reduciendo el gasto en software.

Superar Obstáculos en la Red

A medida que las empresas avanzan en su viaje de transformación digital, la navegación por las redes se vuelve cada vez más compleja. Los equipos de IT ahora identifican de manera proactiva posibles cuellos de botella utilizando herramientas de gestión del rendimiento, optimizando así el transporte de datos y reduciendo la congestión de la red y los costos asociados.

Control Eficiente del Gasto en la Nube

La gestión precisa del gasto en la nube es fundamental para optimizar costes IT. Herramientas de monitorización permiten priorizar tráfico y reducir gastos innecesarios, especialmente en áreas críticas como la salida de la nube. Además, al tener cargas de trabajo en la nube se tiene acceso a un amplio portfolio de servicios que se utilizan en otras áreas y que permiten, por ejemplo, actualizar y centralizar datos en plataformas como los data lakes. También ofrecen herramientas para gestionar el rendimiento, supervisar y controlar gastos, agilizando la gestión de los recursos tecnológicos.

La implementación estratégica de tecnologías en la nube optimiza la utilización de los recursos de tecnologías de la información, lo que conlleva a una mejora en la eficiencia financiera. Al realizar la migración, se pueden aprovechar servicios adaptables que optimizan la asignación de recursos, logrando un equilibrio entre los costos de TI y el nivel de excelencia digital. Estos servicios abarcan todos los aspectos mencionados anteriormente en términos de ahorro de costes. Así, la nube se convierte en un pilar fundamental para garantizar la eficiencia en el ámbito digital.