Cómo la IA mejora la contabilidad — no para sustituir, sino para potenciar al contador

El nuevo estudio “Human + AI en contabilidad: evidencia temprana del campo” de Jung Ho Choi (Stanford GSB) y Chloe Xie (MIT Sloan) revela que los contadores están adoptando herramientas de inteligencia artificial para optimizar sus flujos de trabajo y cerrar sus cuentas con mayor rapidez.

La conclusión es clara: la IA no está reemplazando a los contadores, sino que mejora su trabajo al combinarse con la experiencia humana. Al automatizar los pasos más mecánicos del proceso —como la clasificación de transacciones y la conciliación bancaria— los profesionales pueden dedicar más tiempo al análisis financiero y a la asesoría estratégica.

Contabilidad y automatización: una alianza inevitable

Durante años, la contabilidad ha encabezado la lista de los trabajos más susceptibles de automatización, debido a su dependencia de tareas rutinarias y repetitivas.

Precisamente ese carácter procedural hizo pensar que los sistemas de IA vendrían a sustituir al contador tradicional. Sin embargo, el documento de trabajo de Choi y Xie desafía esta visión, demostrando que la IA actúa como un colaborador, no como un reemplazo.

Resultados concretos del estudio

La investigación, basada en una encuesta a 277 contables y en el análisis detallado de las tareas de 79 pymes, muestra que quienes emplean IA generativa pueden:

  • Atender a más clientes por semana.

  • Cerrar estados de cuenta hasta 7,5 días antes que con métodos convencionales.

  • Reducir en un 8,5 % el tiempo dedicado al back-office rutinario.

    Además, la granularidad de los informes mejora un 12 %, desglosando gastos en categorías más específicas (bonificaciones, beneficios, comidas), lo que enriquece la calidad y la utilidad de los datos.

Multitarea inteligente y supervisión humana

«La IA facilita la multitarea», explica Choi. Para cada cliente, el contador debe extraer información, conectar transacciones y hacer seguimiento de proveedores. Al automatizar estas configuraciones iniciales, la IA permite gestionar más casos con mayor eficiencia.

No obstante, el valor añadido reside en la experiencia humana: los contadores senior intervienen cuando el sistema muestra incertidumbres, aplicando su juicio para validar resultados y garantizar la fiabilidad.

Hacia la eficiencia máxima en contabilidad

La adopción de IA en contabilidad no desplaza empleos, sino que potencia la capacidad de servicio y eleva los estándares de calidad. Al delegar lo rutinario en la tecnología, los profesionales liberan tiempo para tareas de alto valor, como la comunicación con el cliente, el control de calidad o la consultoría fiscal.

Así, la contabilidad es más ágil, precisa y estratégica, apoyada en la combinación óptima entre innovación tecnológica y experticia humana.